Hechos menos amargos: los animales de América del Norte

Descripción física

Considerada como una de las garzas más pequeñas del mundo, la Bittern Bitst pertenece a la familia Ardeidae, y se conoce como Ixobrychus exilis en el mundo científico. Lo que le falta en tamaño, sin embargo, lo compensa con su furtividad y capacidad de acecho, lo que lo convierte en un cazador muy efectivo, aunque pequeño. El Least Bittern solo mide 14 pulgadas de largo, con una envergadura de alrededor de 18 pulgadas. Es bastante ligero y es bastante difícil de detectar en su hábitat natural debido a su coloración marrón o verde. En las raras ocasiones en que se los ve volando en el aire, las alas de estas aves pueden aparecer de color marrón claro o amarillo dorado, con sus lados y cuellos coloreados con tonos marrón naranja o oro amarillo.

Dieta

The Least Bittern obtiene su alimento de pantanos, lagos y ríos, que a menudo se ven perchando o escondiéndose entre las cañas y otra vegetación que crece en el área. Su largo pico está bien adaptado para el ataque y la captura de su presa desde la superficie del agua. El Least Bittern se alimenta de peces pequeños como los peces pequeños y las percas, así como de diminutas serpientes y cangrejos de río. Salamandras, renacuajos, libélulas y sanguijuelas completan su dieta carnívora, mientras que los coyotes y los zorros cazan estas aves a su vez.

Hábitat y Gama

En muchas regiones de la parte central y del este de los Estados Unidos se pueden encontrar enormes poblaciones de Least Bittern, aunque sus inviernos se suelen pasar en lugares más cálidos, como Florida y México. Como la mayoría de las garzas, viven en áreas de agua dulce donde también reside la mayoría de sus fuentes de alimentos, como ríos y arroyos. La razón más importante para la disminución de la población de Least Bittern es la pérdida de hábitat, especialmente la causada por la contaminación del agua. La Ley del Tratado de Aves Migratorias de 1918 ha protegido a estas aves desde su aprobación, aunque la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza las clasifica como una especie de "Preocupación Menor". El Least Bittern está tan bien coloreado que puede mezclarse bastante bien con su entorno, lo que lo convierte en un desafío para detectar en su hábitat natural, y mucho menos para observar, contar y estudiar. Cuando están amenazados, a menudo optan por huir usando sus pies para correr en lugar de sus alas para volar. A menudo se les escucha chirriar o arrullar a primera hora de la mañana, y son tan esquivos que la mayoría de los investigadores de aves solo pueden escucharlos en lugar de verlos.

Comportamiento

El Least Bittern se ve frecuentando los humedales donde encuentran la mayoría de sus fuentes de alimento en lugar de volar por los cielos como muchas otras aves. Los expertos no los llamarían agresivos o territoriales, y muchas veces simplemente se congelarán en su lugar con sus billetes apuntando hacia arriba cada vez que se les toma por sorpresa. Algunos notan su capacidad para hacer movimientos de balanceo, imitando el movimiento de las cañas cercanas, mientras que otros se han maravillado de la capacidad de estas aves para comprimir sus cuerpos cuando sea necesario. Debido a su tamaño más bien pequeño, los animales más grandes se aprovechan de la Bitstora Mínima, aunque su furtividad lo convierte en una presa difícil de atrapar.

Reproducción

Las responsabilidades de construcción de nidos se comparten entre los miembros masculinos y femeninos de la especie Least Bittern. Los nidos se construyen sobre el agua, generalmente en una vegetación bien oculta y densa donde los suministros de alimentos son más abundantes. La hembra produce alrededor de tres a siete huevos de color verde o azul pálido por año, colocando uno cada día durante algún momento de la temporada de reproducción. Ambos padres se turnan para mantener los huevos calientes hasta que eclosionan, después de lo cual alimentarán conjuntamente a los pollos a través de la regurgitación de los alimentos. Se espera que los jóvenes permanezcan en el nido entre siete y catorce días, aunque pueden hacerlo más tiempo si están especialmente alarmados o amenazados.